jueves, 12 de octubre de 2017

Importancia del Inventario Nacional de Glaciares para el conocimiento y gestión de los recursos hídricos en la Patagonia Austral

En el mes de setiembre pasado el Instituto Argentino de Nivología, Glaciología y Ciencias Ambientales (IANIGLA – CONICET) difundió los más recientes resultados del inventario de glaciares en la provincia de Santa Cruz que, con la excepción de la cuenca del río homónimo, se encuentra por completo terminado y publicado. Así, disponemos del estado del conocimiento más actualizado de esta importante reserva de agua dulce en la región, herramienta fundamental para su comprensión y definición de políticas de protección y aprovechamiento.



Argentina es uno de los pocos países que cuenta con extensas superficies de glaciares en su territorio. Segunda en el continente sudamericano en términos de extensión después de Chile, Argentina acumula una superficie estimada de poco más del 20% de los 25.500 km2 documentados a la fecha.Entre otros muchos atributos, los glaciares y otros ambientes asociados constituyen piezas fundamentales para el sistema hidrológico y son mundialmente reconocidos como reservas estratégicas de agua dulce para las zonas bajas de todas las cuencas en que se los encuentra. Constituyen una fuente permanente de agua para ríos que se alimentan de éstos, aún en años con escasos registros de precipitación, aspecto de gran valor para no solo las poblaciones sino para actividades socioeconómicas altamente dependientes del recurso como las agropecuarias. Si se consideran los numerosos servicios ambientales que brindan, asociado a un alto grado de riesgo y de vulnerabilidad, sea de origen antrópico o natural, este recurso debe ser estudiado, monitoreado permanentemente a fin de asegurar una buena protección y gestión.Tras una historia de algunos años, en octubre de 2010 se sancionó la Ley Nacional de  Presupuestos Mínimos para la Preservación de los Glaciares y el Ambiente Periglacial que, entre diversas definiciones, estableció la necesidad de contar con un Inventario Nacional de Glaciares, de actualización periódica, de modo de contar con información detallada sobre el número, área y distribución espacial de los cuerpos de hielo para aportar una estimación de las reservas hídricas existentes en las diferentes cuencas hidrográficas, así como también con información básica para conocer la capacidad reguladora de estos cuerpos sobre los caudales de los ríos. Desde entonces se le reconoció institucionalmente al recurso un carácter estratégico para el consumo humano, el sector agropecuario y el mantenimiento de la biodiversidad natural, entre otros aspectos.En 2011 comenzaron los trabajos de diseño del inventario y entrenamiento de técnicos y profesionales para su ejecución en Instituto Argentino de Nivología, Glaciología y Ciencias Ambientales (IANIGLA – CONICET), en ocasiones en sociedad con organismos e instituciones provinciales como el SIT Santa Cruz, dependiente de la ex–Subsecretaria de Planeamiento de la provincia entre los años 2011 y 2013, para trabajos regionales.De las 13 Grandes Regiones Hidrográficas (o cuencas) que cubren el territorio de Santa Cruz y otros territorios vecinos con recursos hídricos compartidos como la provincia de Chubut al norte, la Región de Magallanes en la República de Chile al sur, y la Región de Ibáñez del Campo también en Chile al Oeste, 8 de ellas tienen una proporción de cordillera y de éstas, en particular 6 tienen alguna cobertura de glaciares. Estimativamente, la superficie total de glaciares ocupa en la provincia 3.461 km2, equivalente al 1,42% de su territorio. Esta cifra aún no es la definitiva dado que pesa sobre la información de la Región Hidrográfica del Río Santa Cruz una restricción de la Cancillería Argentina a la difusión pública de resultados del inventario, hasta tanto no se resuelva el conflicto de límites pendientes con la República de Chile sobre el Campo de Hielo Patagónico Sur.El total de cuerpos glaciarios informados a la fecha, según se desprende de los informes disponibles en la página oficial del Inventario Nacional de Glaciares (www.glaciaresargentinos.gob.ar) asciende a 2.417 representando poco menos del 20% del total del país si bien en términos de superficie la proporción existente en Santa Cruz significa poco más del 60% de la cobertura del país. Estos números contrastan notablemente con la idea generalizada de que nuestros glaciares son pocos. ¿Quién podría nombrar y ubicar más que un puñado? Tal vez la respuesta a esto radique en que resultan más notables y recordables los grandes representantes de que disponemos en la provincia, entre los más grandes del continente, como el Glaciar Upsala con 1.212 km2 o el Viedma con 1.087 km2, en cada caso equivalente a unas 11 veces el tamaño de la ciudad de Río Gallegos!Con la sola excepción de la Región Hidrográfica del río Coyle, ubicada enteramente en territorio argentino, las restantes 5 regiones que poseen coberturas glaciarias son binacionales (si bien es importante considerar que la región del río Santa Cruz tiene aún pendiente la definición de su límite internacional), y de éstas solo 2 son de vertiente atlántica. La producción total anual de aguas solo en estas últimas, alimentada y regulada casi completamente gracias a la presencia de glaciares en sus cabeceras asciende a unos 24.556 Hm3, el equivalente a la provisión posible de agua durante un año a una población de 269 millones de personas o bien al riego de una superficie estimada de 1,5 millones de hectáreas de cultivo (en las condiciones ambientales propias del sur de la provincia). Importantes valores de referencia, ¿no?Junto con una diversidad de datos que actualmente se compilan en el Banco de Datos Hidrometeorológicos de la provincia, la información generada en el Inventario Nacional de Glaciares supone una contribución fundamental y un salto cualitativo en el conocimiento del recurso hídrico para Santa Cruz, de especial valor para la planificación de su gestión y protección, particularmente en el contexto de cambio climático que comienza a hacerse evidente en años recientes y que impacta decididamente en éste.